LA MODA EN EL SIGLO XlX

Hola, somos Sara y Natalia de 2º de bachillerato de ciencias de la salud, y vamos a dar comienzo a nuestro blog que trata de "LA MODA EN EL SIGLO XLX", queremos que sirva de información y sobretodo que sea divertido e interesante. Abarcaremos varios temas, desde la moda, hasta la decoración y la bisutería, sin olvidarnos de algunas curiosidades. En un principio comenzaremos con una descripción de cómo vestían los hombres en este siglo, y segidamente, otra descripción de cómo vestía la mujer en el mismo período. Describiremos su vestimenta con todo tipo de detalles sin olvidarnos ninguno, a continuación daremos paso a dichas descripciones...

Decoración siglo XlX

Seguidamente, hablaremos también sobre la decoración de diversos edificios, establecimientos y alojamientos ya sean casas, Iglesias, escuelas, fábricas, etc.

Edificio de la sala de máquina de vapor Buxeda_Vell

Edificio de la sala de máquina de vapor Buxeda_Vell
Del Vapor Buxeda Vell se conserva la sala de máquinas, donde está la máquina de vapor semifija Wolf (1908), y la sala de calderas. Actualmente, el Vapor Buxeda Vell es la sede del Museu de la Indústria Tèxtil Llanera

Casa Antoni Casanovas

Casa Antoni Casanovas
En el año 1859, el fabricante y alcalde sabadellense Antoni Casanova mandó construir esta casona en la c. de Sant Antoni. El edificio, obra del arquitecto Josep Antoni Obradors, es representativo de la construcción mixta formada por un cuerpo de vivienda y una parte industrial por detrás, que da a un patio. Después del uso residencial, la casona acogió a diversas instituciones. Fue sede de los juzgados, de la Caixa d'Estalvis de Sabadell y de la Escuela Industrial hasta que en 1931 fue destinado a acoger el Museu de la Ciutat. En el año 1971, una vez las secciones de paleontología y arte habían conseguido un museo propio, se convirtió en el Museu d'Història

DIFERENCIAS ENTRE EL TRAJE DE FALLERA DEL SIGLO XVIII

  1. CAMISA: Es la pieza de ropa interior. Suele ser a conjunto con la enagüas.
  2. ENAGÜAS: Son la parte de ropa interior que se lleva bajo la falda. Va acompañada de un ahuecador para asi darle vuelo a la falda
  3. MEDIAS: Suelen ser de seda o algodón y con bordados de flores, iniciales...
  4. ZAPATOS : Normalmente están forrados con la misma tela del traje, y hay de diversos gustos: de punta redonda, cuadrada, con lazo...
  5. FALDA: Una de las partes que mas luce en el traje de fallera. Suelen ser telas de seda o rayon estampadas con flores de colores o borcateladas.
  6. CORPIÑO: Parte superior del traje, que va acompañada de manteletas. Suele ser de la misma tela que la falda, y la característica del traje del siglo XVIII es que es de media manga (hasta el codo), sin embargo en el traje de valenciana del siglo XIX las mangas del corpiño son de farol, es decir, de manga corta. Las mangas de farol suelen ir fruncidas y acompañadas de puntillas. Las del siglo XVIII pueden ir acompañadas de puntilla o de un simple lazo, segun gustos.
  7. LAS MANTELETAS: Las manteletas pueden ser de tul, de seda... y van bordadas de hilo de oro o de plata labrando en la misma tela de la manteleta preciosos dibujos. Su acabado puede ser en forma cuadrada o redondeada.
    Las manteletas se componen de la manteleta superior, que es la que se lleva en el corpiño, y la manteleta inferior, el llamado delantal. Ambas llevan el mismo bordado.
  8. LAS PEINETAS: Las peinetas son del mismo estilo para los dos trajes, pueden ser cinceladas en latón plateado o latón en oro. Se colocan sobre los moños.
  9. EL ADEREZO: El aderezo es otro de los accesorios que mas se luce en el traje de fallera. Suele estar hecho a mano por un orfebre. Para el siglo XVIII el aderezo suele estar compuesto de una cholla, que se coloca en la parte superior del corpiño, junto al escote, el collar, el cual suele ser una cruz, una virgen o cualquier otra cosa mas relacionada con el ámbito religioso, como puede ser un camafeo. Para el siglo XIX suele ser a conjunto con la cholla y suele ser de varias tiras de perlas acompañadas con un broche central o dos laterales. Las agujas, son las agujas que se clavan en el moño trasero y sirven de sujecion de éste.



*ANTES DESPUES*






YA EN LOS TIEMPOS MODERNOS: TRAJES SENCILLOS Y CÓMODOS

En la segunda mitad del siglo xix aparece la máquina de coser, elemento que ha de revolucionar cl arte del vestido al poner al alcance de las elegantes un instrumento de alto valor para la confección de las ropas.

Hasta aquí, al hablar del traje lo hemos hecho refiriéndonos casi exclusivamente a los pueblos europeos y, de éstos, a los occidentales, pues de ellos deriva nuestra civilización. Varios capítulos requeriría referirse a los trajes de todos los pueblos del mundo y a su evolución histórica; por eso solamente hicimos algunas consideraciones generales al respecto. Nos resta agregar ahora que las clases sociales más poderosas eran las únicas que podían permitirse modificar sus vestimentas de acuerdo con los dictados de la moda, imponiendo su personalidad o sus gustos, cosa imposible para el pueblo en razón de su incapacidad económica. Por eso los trajes populares, típicos de cada región, se han mantenido sin modificaciones sustanciales durante largos años.

Sólo cuando sobrevienen los cambios económicos y sociales del siglo xix, con el maquinismo y el encumbramiento de la burguesía y de la clase media, van desapareciendo las diferencias exteriores en el traje. La moda masculina varía notablemente: desaparece el calzón corto, reemplazado por el pantalón, ancho primero y luego más angosto, que cae sobre el empeine. Se imponen la americana, el traje deportivo, el calzado cómodo y fuerte, y el cuello blando.

Desaparecidos el miriñaque y el corsé, el vestido de la mujer se simplifica para adaptarse a las necesidades de la agitada vida moderna, y lo mismo sucede con el peinado. Finalmente, el vestido responde a la estructura física y a su misión funcional, marcando la cintura y la cadera.

En nuestra época, el hombre, con las barbas rasuradas, cabellos cortos y trajes sencillos, luce varonil y elegante; la mujer, con ropas cuyas líneas se han adaptado a la gracia de su silueta, ha ganado en soltura, atractivo y distinción.

CURIOSIDAD:::*EL MONARCA QUE ESTRENO UN PAR DE MEDIAS PARA ASISTIR A LAS BODAS DE SU HERMANA

Los siglos xv y XVI aportan un material de exquisita sugestión y gran belleza: el encaje, profusamente usado en la ropa interior, ya generalizada, y en golillas, pañuelos, cuellos y puños.

Ambos sexos lucen hasta la exageración pedrerías, polvos, rizos, cintas y lazos. En esta época aparecen definitivamente separados el calzón y las medias. Ya hemos visto que los pueblos antiguos desconocían el uso de las medias: los galos y los romanos ceñianse las piernas con bandas y correas.

En el medievo, lo que constituye la media formaba la parte inferior de las calzas y, luego, de las medias calzas. Las primeras medias que se mencionan en la historia son las de punto que estrenó Enrique H, rey de Francia, para asistir a las bodas de su hermana. la princesa Margarita, con Manuel Felipe, duque de Saboya.

Las medias del rey causaron honda impresión entre los cortesanos y la elegantes de la corte, tanta que la industria de tejer medias adquirió enseguida gran volumen. Las medias, accesorio del traje al que la mujer moderna presta preferente atención, sirven en algunas regiones de España, por ejemplo en Salamanca y Extremadura, para determinar, por su color, el estado civil de las mujeres: las solteras las usan blancas; negras las viudas. y verdes o rojas las casadas Hacia fines del siglo xvi hace su aparición en Europa el abanico, prenda originaria de Oriente, que alcanzó prontamente gran difusión; las mujeres hicieron de él un eficaz colaborador de su coquetería, llegando hasta adjudicar a sus movimientos un lenguaje o significado convencional.

En China y Corea, las mujeres que guardan luto no pueden prescindir de él cuando salen, va que deben utilizarlo para taparse el rostro al cruzarse con otras personas en la calle. El abanico, que sufrió frecuentes y prolongados eclipses, ha vuelto a usarse profusamente aun en nuestros días. Durante el siglo xvii el vestido femenino alcanza proporciones monumentales, pues aunaue el corsé ciñe terriblemente el talle, la cadera aumenta de volumen por medio del miriñaque. El hombre comienza a usar el calzón liso y ancho, sujeto a la ro dilla por una cinta y cortado verticalmente por uno o dos tajos que dejan ver la ropa interior. Las botas altas se abren en la parte superior en forma de embudo.

La chaqueta corta deja ver, por las aberturas de los costados, la camisa. El sombrero se recarga de plumas y cintas. La gorguera ha ido desapareciendo y las mujeres usan escotes cuadrados y bajos, por donde asoma la camisa plegada. Todo el inundo lleva pelucas, y se llega a la máxima extravagancia en Francia durante el brillante reinado de Luis XIV.

Vestimenta, complementos y detalles de la moda en el hombre del s. XlX

Los hombres chisperos visten calzones con faja de seda y chaquetilla de alamares, las clases elevadas llevan frac con hombreras anchas y cuello vuelto. Calzones ceñidos o pantalones. Chaleco y corbatín o corbatas anchas. Redingotes. En 1840 el frac es ajustado y con faldones mas estrechos; el pantalón tiene trabilla, usándose levita con amplios faldones. El chaleco es corto y la corbata grande. Esclavinas. Pelo rizado y largo, bigotes, patillas y perillas. Sombreros con capa alta.

Vestimenta, complementos y detalles de la moda de la mujer del s.XlX

El primer tercio del siglo, la mujer sigue llevando los trajes con ligeras modificaciones. Añadiéndose en España a las modas francesas blondas y mantillas. En 1830 se almidona y ahueca la falda, baja el talle, vuelve el corsé y las mangas se acortan y se abullonan. A mediados del siglo reaparece el miriñaque de crinolina, con volantes y se usa polizón abultado por detrás y corpiño ajustado. Peinado en bandos con trenzas y rizos, con moño alto y tirabuzones que luego se substituyen por bandos con tirabuzones y moño. Cofias de terciopelo, sombreros pequeños y pamelas, con bridas de cintas.

Zapatos descotados con un cruzado de cintas patos con punta estrecha, que luego se ensancha.

LA MODA SEGÚN ALGUNAS REVISTAS

En la biblioteca pública de New York en inglés New York Public Library (NYPL) se encuentra alrededor de 160 láminas de una gran revista de moda como es “The Peterson’s Magazine” que fue publicada entre los años 1843 y 1898, cuya edición americana es “Les Modes Parisiennes”. En el período de la última mitad del siglo XlX existió una gran proliferación de las revistas de modas actuales en aquella época, de las cuales había bastante variedad de ejemplares diferentes. Por aquella época hubo una gran cantidad de mujeres latinoamericanas que tenían conocimiento de costura, y si no lo tenían, seguro que pertenecían a una clase privilegiada, es decir, con mayor nivel económico, por lo que podían pagar a alguien que les confeccionara el vestido. Tomaron como modelo lo expuesto en las láminas de las revistas que circulaban por aquella época, y que a continuación alguna de ellas se las podremos ofrecer:

EL DESARROLLO DE LA MODA EN EL SIGLO XIX

A continuación hablaremos sobre la moda burguesa de la época y no a la vestimenta tradicional. Aunque hemos considerado interesante incluirlo para que sirva de contrapunto, comentando la moda de las clases acomodadas en sus diferentes períodos en el siglo XlX, período en el que las clases populares vestían con su propio estilo, en puntos diferentes e iguales, ya que es indudable que la Alta Costura, propagándose desde la clase más alta de la sociedad hasta la más baja extendiéndose por todos los niveles de la pirámide social, es, en buena medida, responsable de la evolución que experimenta la vestimenta popular.
Podríamos considerar la moda como un placer que reafirma la vanidad y divide las clases sociales de acuerdo a la vestimenta. Pero la moda es mucho más que eso. Al igual que otras costumbres, la moda habla de la sociedad, nos muestra los elementos que son importantes en una cultura y de qué manera su gente vive y se desenvuelve en un contexto histórico, social, laboral y geográfico determinado, todo esto influye en cada una de las piezas que conforman la vestimenta.A finales del Siglo XIX era impensable que las mujeres llegasen a liberarse del corsé, o que un día se pusieran faldas que dejasen ver sus piernas. Antiguamente, los patrones que regían la moda eran estéticos, despreocupando factores considerados secundarios, como la comodidad e incluso el bienestar físico. Con los cambios tan grandes ocurridos durante el siglo XX en las formas del vestir y en la tecnología, es fácil imaginar que en un futuro próximo surgirán nuevas e innovadoras prendas auspiciadas por la tendencia al confort, la comodidad y la llegada de avanzadas fibras textiles.